Paso rápidamente por la tienda de comestibles, agarrando los pocos artículos que necesito: platillos congelados, refrigerios bajos en carbohidratos y Windex, decidida a entrar y salir en menos de 15 minutos para poder seguir con mi ajetreada vida. Doblo una esquina a 60 kilómetros por hora y me detengo en seco.
Los Leones…sirven a diario en primera línea donde hay necesidad y sufrimiento…ofreciendo consuelo, cuidado y compasión a las personas necesitadas…
Allí, en una destartalada silla de ruedas, hay un anciano de aspecto triste que está batallando para meter una lata de frijoles en su carrito. Observo esta escena durante un segundo y me inunda una ola de compasión. Me pongo manos a la obra y lo ayudo a sacar la lata de frijoles del estante y luego a sentarse en la silla de ruedas. Le sonrío para hacerle saber que alguien se interesa por él. Me devuelve la sonrisa, ya más relajado por el gesto amable de un extraño.
¿Quién detendrá la lluvia?
Termino de hacer la compra, pensando no solo en este hombre que intenta desplazarse y vivir su vida con mucha dificultad, sino en todas las otras visiones de lucha y sufrimiento que ahora inundan mi mente. No solo está lloviendo en mi alma, también está lloviendo aquí en Chicago, otra vez. Qué simbólico del mundo en el que vivimos.
Hay tantas personas que están enfermas en casa o en el hospital y no tienen a nadie que las visite. Niños que viven con diabetes o que están luchando contra el cáncer. Enfermedades, hambre y horrores de la guerra. Hogares divididos y personas destrozadas que necesitan a alguien que los repare.
Gracias a Dios por los Leones y los Leos. Sirven a diario en primera línea donde hay necesidad y sufrimiento, en todo el mundo; ofreciendo consuelo, cuidado y compasión a las personas necesitadas.
Los Leones son la luz del sol en un mundo de tempestades
En el soleado Caribe, el Club de Leones Antigua alivia el sufrimiento de la comunidad de muchas maneras, entre ellas, proporcionando ayuda médica a los niños. “Nuestro club ayudó con el viaje de una familia a Cuba para evaluar a su hijo de seis meses que tenía convulsiones constantes”, comentaba la socia León Valerie Gonsalves-Barreiro, MJF. “También organizamos un viaje a Trinidad para una niña de ocho años que tenía un tumor cerebral. Cuando la familia vino de regreso, agradeció a nuestro club haber dado a su hija una segunda oportunidad para vivir. Nos hace sentir tan bien el poder ayudar a otros”.
La León Kay Mills del Club de Leones Middletown Kentucky nos explicaba que su club sirve el desayuno tres días a la semana en un refugio para personas sin hogar para ayudar a mitigar el hambre. “También tenemos un fondo denominado Helping Hand Up que atiende las necesidades a corto plazo de familias necesitadas”, añadía. “También extendemos la bondad de los Leones a los jóvenes de nuestra comunidad. Una vez al mes, me reúno con los alumnos de quinto grado de una escuela local y hacemos algo bueno por otros. El día de Halloween, dibujamos tarjetas para los residentes de un hogar de ancianos. También hemos hecho marcadores para el programa de lectura de verano y bufandas de lana para regalar en invierno”.
Un mundo inundado de necesidad
El proyecto de servicio europeo Los Leos luchan contra el hambre empezó oficialmente el 1 de julio de 2019. Los Leo recogen alimentos de restaurantes, pubs y supermercados, y los distribuyen entre jóvenes y familias necesitadas.
“Además del proyecto Los Leos luchan contra el hambre, mi club participa en actividades de distribución de ropa a personas sin hogar durante el invierno”, comentaba el Leo Giacomo Sillani del Club Leo de Bramante Cinque Giornate de Milán, Italia. “Y cada año en el mes de abril, junto con nuestro club de Leones patrocinador, ofrecemos exámenes gratis de la vista a quienes lo necesitan. La gente probablemente no recordará lo que hicimos por ella, pero recordará las sonrisas, las nuestras y las de ellos. Y nosotros recordaremos cómo nos miraban, llenos de esperanza en el futuro”.
Plantar semillas de bondad
El León-Leo Wilson T. Chadzamira del Club de Leones Greater Harare de Harare, Zimbabue, cree que saber es poder. “Los Leos ayudan a aliviar el sufrimiento del mundo al ofrecer oportunidades para que los jóvenes vayan a la escuela. Algunos clubes Leo de nuestro distrito múltiple 412A llevan a cabo actividades de recaudación de fondos para pagar la matrícula de los jóvenes desfavorecidos. También hemos participado en actividades para mejorar el medio ambiente, limpiando y plantando árboles”.
Los Leones definitivamente están cambiando el mundo a mejor, decía el León Richard Stevenson del Club de Leones South Tucson. “La única manera de romper el ciclo de pobreza es mediante la educación, y el 80% del aprendizaje es visual,” señalaba. “Identificar a los niños que necesitan un examen de la vista profesional y posiblemente gafas, y conseguirlas para ellos es esencial si queremos asegurar que las generaciones futuras puedan ser ciudadanos productivos.
“Durante uno de los primeros eventos de exámenes de la vista en el que participé, un maestro alentó a un niño: ‘Adelante, dile’. Este niño se me acercó y me dijo tímidamente, ‘Gracias por las gafas nuevas’. Luego, se abrazó a mis rodillas. Y así fue. Empecé a dedicarme a examinar la vista de los niños en las escuelas locales. Acabamos de terminar el examen número 80.000 de este año. Estoy muy orgulloso de ser León”.
Desde ayudar a las personas con enfermedades como la diabetes y el cáncer hasta prestar auxilio en casos de desastre, y alimentar a las personas sin hogar, los Leones y Leos de todo el mundo están aliviando el sufrimiento de millones de personas. Pero sobre todo, les están dando algo aún más importante: los dones de la bondad y la esperanza. En este mundo, cada vez más impersonal, están haciendo saber a las personas que hay gente que se interesa por ellas.
Obtenga más información sobre las causas globales de los Leones y cómo los Leones están propagando la bondad y la compasión en todo el mundo.
Madeleine Miller, ABC es la especialista estratégica principal en comunicaciones de la Asociación Internacional de Clubes de Leones.
