En Quito, Ecuador, el programa Lions Quest de la Fundación Lions Clubs International ayuda a proporcionar un sentido de comunidad y pertenencia a los jóvenes del Colegio Alemán Quito.
Este programa, que se aplica en 110 países, ofrece un enfoque integral y coordinado de la prevención en las escuelas y ayuda a los maestros a desarrollar habilidades para prevenir conductas de riesgo en los niños, cultivando al mismo tiempo comportamientos sociales positivos.
Creo que una de una de las mejores maneras de servir a nuestra comunidad es adoptar este programa, porque se pueden ver resultados extraordinarios en los niños y jóvenes.
El Colegio Alemán Quito ha estado ejecutando el programa Lions Quest desde que lo implantó por primera vez en el curso 2014-2015. Mediante el aprendizaje social y emocional, el programa refuerza habilidades sociales y personales clave y previene comportamientos perjudiciales para los niños y los demás.
Lions Quest fomenta el autoconocimiento y la autoeficacia para que los niños y jóvenes puedan tomar decisiones positivas. El programa ayuda a niños y adultos a controlar emociones, fijar y alcanzar metas, sentir y mostrar empatía por los demás, establecer relaciones positivas y tomar decisiones responsables.
“En Lions Quest, aprendí que todos mis amigos deben formar parte de un equipo. Todos se ayudan mutuamente", dijo Ivanna, alumna del Colegio Alemán Quito.
Isaac Abad Crespo, expresidente de consejo y asesor de Lions Quest del Distrito G-1, descubrió el programa hace 12 años y ayudó a la escuela a adoptar el programa. En 2019, LCIF concedió una subvención para alianzas comunitarias de 15.000 dólares al Distrito G-1 para ayudar a la escuela a poner a prueba la edición más reciente del programa y ampliar las actividades de Lions Quest en la escuela, añadiendo Habilidades para la adolescencia.
“Creo que para nosotros, los padres, es una herramienta importante que ayuda en el desarrollo socioemocional de los hijos", afirma Carolina Domínguez, madre de alumnos de la escuela. "Mis hijos utilizan muchas estrategias de Lions Quest para hablar y resolver conflictos.”
Gabriela Reyes, maestra de la escuela y coordinadora de Lions Quest, dijo que notó una diferencia en la forma de escuchar de los niños entre los ocho y los nueve años. Por ejemplo, varios niños dieron ejemplos de diferentes situaciones en las que no se sentían escuchados, especialmente en casa. Una niña comentó que se había dado cuenta de que no escuchaba correctamente a sus padres cuando querían hablar con ella, dijo Reyes.
“Si se empieza a trabajar con los niños en la adquisición de habilidades sociales y emocionales a una edad temprana, creo que tendremos niños que influirán positivamente en la comunidad a la que pertenecen", afirmó Reyes.
Reyes y Abad están deseando ver el impacto continuo que el programa tiene en la juventud.
“Nuestro lema es servir. Creo que una de una de las mejores maneras de servir a nuestra comunidad es adoptar este programa, porque se pueden ver resultados extraordinarios en los niños y jóvenes, y ellos son nuestro futuro", dijo Abad.
Obtenga más información sobre cómo ayuda LCIF a los niños y las escuelas a través del programa Lions Quest.
Elizabeth Edwards es especialista en contenido en la Fundación Lions Clubs International.
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